El apio (Apium graveolens) es una especie vegetal perteneciente a la familia de las Apiáceas, antiguamente conocidas como umbelíferas.
Descripción:
Es una planta bianual, cuyo rizoma, muy corto, lleva hojas alternas, compuestas, pinadas, de peciolo muy desarrollado y acanalado longitudinalmente. Del centro de las hojas se eleva el segundo año una segunda ramificación robusta con umbelas compuestas, de flores pequeñas, de color verde amarillento. Los frutos son aquenios dobles, y las semillas conservan sus facultades germinativas siete u ocho años.
El apio crece espontáneo en toda Europa, así como en el Norte de África y en la India.
El cultivo de esta planta es muy antiguo. Dioscórides y Plinio la mencionaban como bastante diseminada en su tiempo en los huertos. Los cuidados del cultivo y la selección han transformado la planta silvestre en los dos tipos siguientes:
- Apio cultivado (Apium graveolens sativum o Apium dulce) que se cultiva en una gran parte del mundo, y cuyas hojas cocidas sirven de condimento. Los tallos y los peciolos de las hojas se comen crudos en ensalada, y son diuréticos.
- Apio inculto silvestre (Apium graveolens), cuyas raíces y semillas son diuréticas y excitantes. La primera es una de las cinco raíces llamadas aperitivas, y las segundas son aromáticas y forman parte de las cuatro simientes cálidas.
La decocción en leche de las hojas de este apio se usaba contra el catarro pulmonar, el asma húmedo y la afonía. También se empleaban estas hojas en cataplasma, en las contusiones, humores escrofulosos e infartos lácteos del pecho. El zumo en gargarismos es antiescorbútico.








2 valoraciones en la planta de Apio
Andrea Troiteiro Quinteiro –
Llegaron perfectamente
info1 –
perfecto