Tenemos dos opciones para conseguir plantel de fresa: dividiendo las matas viejas o trasplantando por estolones, que son las plantitas que crecen a lo largo de las ramificaciones que forman las freseras.
Para la división de matas, en septiembre elegiremos las más sanas y vigorosas y las limpiaremos de hojas secas y de los estolones cercanos; recalzaremos los pies con tierra suelta para favorecer la emisión de raicillas, regando si fuese preciso. Desde finales de septiembre y durante el mes de octubre arrancaremos las matas y procederemos a la separación de plantas, eligiendo para el trasplante tan sólo las que tengan raicillas nuevas y presenten uno o dos brotes incipientes. Cortaremos las raíces y hojas viejas y las trasplantaremos al huerto, o las repicaremos en macetas para que enraícen bien. Tras la operación regaremos copiosamente. Este método suele usarse en las variedades que no dan estolones.
La multiplicación mediante estolones es más sencilla que la de división de matas. Para ello, elegiremos las que han emitido estolones y proceden de madres sanas y vigorosas; suprimiremos las flores y frutos que puedan tener y las plantaremos en macetas con sustrato o directamente en la tierra. Esta operación podemos llevarla a cabo desde mediados de agosto hasta finales de octubre (aunque es posible realizarla en cualquier época del año).
Las plantas repicadas en macetas las trasplantaremos al aire libre a partir de marzo, con un marco de plantación de 30 o 40 cm en todos los sentidos.
4 valoraciones en la planta de Fresa
Caridad –
Todo llegó en perfectas condiciones
Caridad –
Todo llegó en perfectas condiciones
Ruben Sanchez fernandez –
Viene todo muy bien empaquetado, y la planta muy fresca y cuidadas. Excelente!!
bea__vr –
Llegó en perfecto estado, y con algunas fresitas ya, está cuajada de flores!